UN DECÁLOGO PARA LA REFLEXIÓN
a propósito del libro
BUSCANDO A DIOS EN EL UNIVERSO (ERASMUS)
Ramón TAMAMES

En mi libro Buscando a Dios en el universo, trato de desvelar, de alguna manera, por qué una serie de eventos cosmológicos, cabría decir, están a favor de la idea de una Inteligencia Superior (IS, el Dios posible) que en momentos determinados puede haber intervenido en pro de la creación del cosmos y su triple evolución: del espacio/tiempo desde el big bang, esto es, desde el universo como un libro abierto (Galileo dixit), a un complejo programa de ordenador, para una expansión indefinida o con retorno (big crunch).

En paralelo, la materia, desde el plasma originario se diversificó a más de cien elementos de la tabla periódica de Mendeléyev, ordenados según su creciente peso atómico de cada uno. Todo eso, sin olvidar las enigmáticas materia y energía obscuras. En tanto que la evolución biológica se desarrolló desde la primera bacteria viviente hasta el homo sapiens, con las posibilidades futuras del transhumanismo en el antropoceno.